El objetivo ha sido dar a conocer a los propietarios las herramientas para disminuir la vulnerabilidad de las viviendas ante los incendios forestales
TDB te mantiene informado. Síguenos en : Facebook, Twitter e Instagram
El Servicio de Gestió forestal y Protecció del sòl de la Conselleria de Medio ambiente y Territorio ha participado, este martes, en un taller de autoprotección ante el riesgo de incendios forestales dirigido a propietarios y residentes de la urbanización de Canyamel, en el término municipal de Capdepera. El taller ha sido organizado por el ayuntamiento y ha contado con la colaboración, también, de la Dirección General de Emergencias e Interior.
Se trata de un taller experimental, de cariz práctico, en el que se han visitado algunas propiedades para ver in situ los procedimientos más eficaces para romper la continuidad horizontal y vertical del combustible vegetal en las parcelas y jardines de la urbanización y cuáles son los elementos o estructuras de las construcciones y de su entorno que se pueden mejorar para tener una propiedad más segura.
Canyamel es una urbanización que por su estructura y su entorno tiene un riesgo extremadamente elevado de incendio forestal. Es por eso que el objetivo de este taller es dar a conocer a los propietarios las herramientas para mejorar su seguridad y disminuir la vulnerabilidad de las viviendas frente a los incendios forestales.
El artículo 77.3 de la Ley 3/2019 Agraria de las Illes Balears dice que en el caso de las viviendas unifamiliares con zonas de interfaz urbano-forestal se tendrá que ejecutar y mantener una franja exterior perimetral de seguridad de 30 metros de anchura mínima.
Las características que tiene que cumplir la franja de seguridad de 30 metros son:
– Distancia mínima entre copas de los árboles de 3 m.
– Distancia mínima de las copas de los árboles a la vivienda de 3 m.
– Poda de pies arbóreos adultos a una altura mínima de 3 m de tierra.
– Cobertura arbustiva inferior al 30%.
– No habrá pies arbustivos a menos de 3 metros de la vivienda.