El presidente Llorenç Galmés y la vicepresidenta y consellera de Cultura y Patrimonio, Antònia Roca, han visitado este viernes la Iglesia de la Sang, donde han comprobado de primera mano el desarrollo de las tareas de restauración y conservación del belén, a cargo de la empresa Tracer SL.
Se trata de una de las piezas más emblemáticas del patrimonio histórico y cultural de Mallorca. La restauración, iniciada en el mes de abril, pone fin a más de diez años de abandono y deterioro de esta joya artística.
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Inician las obras de restauración del belén de la Sang
«Estamos muy satisfechos de que, finalmente, se hayan iniciado las tareas de restauración del belén de la Sangre. Era una actuación urgente e imprescindible. Este equipo de gobierno tenía claro que recuperar este elemento tan querido de nuestro patrimonio debía ser una prioridad», afirmó Galmés.
La intervención ha sido adjudicada a la UTE Tracer Conservación y Restauración SL – Carlos Sánchez Gómez, especializada en la conservación de bienes culturales.
Se trata del belén napolitano más antiguo de Europa, declarado Bien de Interés Cultural (BIC) en 2003. El proyecto cuenta con un presupuesto de 400.000 euros y un plazo de ejecución de 15 meses.
Actualmente, el equipo de restauradores trabaja en la fase inicial del proyecto, que incluye:
- Estudios de documentación histórica y fotográfica.
- Levantamientos tridimensionales (3D) de las figuras principales.
- Análisis con luz ultravioleta (UV) para identificar alteraciones superficiales.
- Ensayos de limpieza y pruebas de solubilidad en elementos seleccionados.
Una vez finalizados los trabajos, el belén de la Sang, que fue retirado hace más de una década, volverá a exhibirse al público para que la ciudadanía pueda disfrutarlo nuevamente.
«El belén de la Sangre forma parte de la memoria colectiva de muchas generaciones de mallorquines. Ahora volvemos a ponerlo en valor. Con este proyecto, reafirmamos nuestro compromiso con la protección, conservación y difusión del patrimonio cultural de nuestra isla», concluyó el presidente Galmés.