Guía 2025 sobre pensiones contributivas y no contributivas: características, cuantías y requisitos

Oct 26, 2025 | Actualidad, Destacado, Entrevista, Portada, Publicación, Revista Lloseta, TDB, Tradición

En 2025, las pensiones contributivas se han incrementado un 2,8 %, mientras que las no contributivas han aumentado un 9 %, con el objetivo de mantener el poder adquisitivo de los pensionistas y apoyar a las personas con menos recursos.

Las pensiones contributivas son prestaciones económicas vinculadas a las cotizaciones a la Seguridad Social. Su cuantía depende de los años cotizados y de las bases de cotización del trabajador. Abarcan distintas modalidades: jubilación, incapacidad permanente, viudedad, orfandad y en favor de familiares.

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Guía 2025 sobre pensiones contributivas y no contributivas: características, cuantías y requisitos

  • En 2025, la pensión media del sistema asciende a 1.314 euros mensuales, siendo la de jubilación de 1.508,7 euros y la de viudedad de 936,3 euros.
  • Para acceder a una pensión contributiva, se requiere haber cotizado al menos 15 años, dos de ellos dentro de los 15 anteriores a la solicitud.

Por su parte, las pensiones no contributivas están destinadas a personas sin recursos suficientes, aunque no hayan cotizado o no cumplan los requisitos mínimos de cotización. Pueden ser de jubilación o invalidez, y en 2025 alcanzan una cuantía anual de 7.905,80 euros (568,70 euros mensuales en 14 pagas).

  • Para la pensión no contributiva de jubilación, se exige tener 65 años o más, residir legalmente en España durante 10 años (dos consecutivos previos a la solicitud) y carecer de ingresos superiores al límite establecido.
  • Para la de invalidez, se requiere tener entre 18 y 65 años, residir en España durante 5 años (los dos últimos consecutivos) y acreditar una discapacidad igual o superior al 65 %.

Ambos tipos de pensión son incompatibles entre sí, aunque la pensión de viudedad puede compatibilizarse con otras en algunos casos. Además, los profesionales sanitarios del sistema público pueden continuar trabajando y percibir hasta el 75 % de su pensión de jubilación, medida que refuerza la atención primaria.

Estas prestaciones consolidan un sistema de protección social que garantiza la dignidad y estabilidad económica de millones de personas, especialmente de aquellas en situación de vulnerabilidad o con carreras laborales interrumpidas.